El Mirador de Almanzor

They have a place with a great potential but they could care for it a bit more. For example replacing broken lamps and missing bulbs, soundproofing the rooms (you hear all the conversations and other unpleasant noises next door), cleaning the decoration fabrics in the room, etc. An extra effort would largely pay for a more comfortable stay.

The entire experience was horrible. The “Hotel” is a house located at the end of steep and narrow dead-end street impossible to locate. If you happen to speak Spanish, and you find someone in the street, they will send you to a restaurant with the same name as the hotel at the other end of town. After checking in, they send you back with your key to the so called “hotel”. Since there is no place to park or turn around, you have to park the car in the town square, and carrying your suitcases, go down a steep narrow street to what happens to be a house ( all this in the middle of the afternoon with temperatures above 100). Once inside the very dark and narrow stairs, you have to look for your room number ( one of six) and trying to fall in the dark, open the door of your so called hotel room. Since there is no air conditioning, and the window in our room was closed to avoid the bugs, as you entered the room, you broke into an instant sweat. To top it all, the toilet did not flush, and there was no pressure for taking a shower. After a sleepless night fighting the mosquitoes and being overwhelmed by the unbearable heat, we left as quickly as possible, leaving behind what has been our worse hotel experience ever. We travel a lot, and after lodging in many many hotels, I have never written a review, but this had to be the one. This one was “The Hotel in Hell.”

Las habitaciones están bien y limpias. Les falta un poco más de iluminación,ves decir alguna lámpara o bombilla más.bNo hay secador de pelo ni gel de baño, solo champú y pastilla pequeñita de jabón de manos. El restaurante están bien para desayunar y cenar.

Ruidoso, con paredes de papel. No hay ni una silla para sent**** y mucho menos sitio para dejar las maletas. Se escucha todo, sobre todo las cañerías. Nos alojamos en la habitación 11 y la segunda noche caía agua por el techo y empapó la cama. El propietario ( el del bar donde se retiran las llaves ni se molestó en ir a verlo, estaba claro que no era la primera vez. Al dejar la llaves nos dijo que no sabia que había podido suceder, cuando luego ví en google que ya hay reseñas de la inundación de la habitación 11. Nos cambiaron a otra habitación abuhardillada con una miniventana, muy calurosa. No hay ningún tipo de seguridad, la única puerta que está cerrada de toda la casa es la de la habitación ya que las dos de la calle están abiertas y no hay nadie en recepción. La llave tienes que ir a recogerla a un bar a 400 m, de eso te enteras cuando llegas al pueblo en donde no hay cobertura y tienes que ponerte en contacto con el propietario. Hay poca señal de TV y se ve fatal. Habitación oscura con poca luz, la única lamparilla de la mesita con los cables pelados.

Llamé para el día del padre para reservar dos habitaciones, eran 2 experiencias de la empresa Wonderbox, ya me contestaron un poco borde diciendo que habían dejado de trabajar con muchos cofres de ese tipo, que lo mismo me cobraban un suplemento. Tras comprobarlo con las referencias me hacen la reserva de ambas habitaciones, la mala suerte hizo que cuando llevábamos apenas 20 minutos de camino, nos llamaron para notificarnos el accidente de un familiar, lógicamente nos dimos la vuelta. Volví a llamar al establecimiento, apenas habían pasado 53 minutos desde que hice la reserva, le dije que si podíamos aplazarlo para otro día o cancelarlo, pues muy amablemente me dijeron que no, que cuando quisiéramos ir nos harían "un descuento". Vamos, cero empatía, por mí pueden esperar sentados porque tengo CLARÍSIMO donde no voy a ir.

El Mirador de Calatañazor casa rural emblemática en el pueblo medieval de Calatañazor (Soria) fácil aparcamiento en la plaza mayor junto al castillo, bonitas vistas del desfiladero. A 5 km del Sabinar de Calatañazor cerca de la Casa del Parque información turística de la zona, sendero llano y fácil a La Fuentona de Muriel ( 8 km ida y vuelta). La restauración es abundante y exquisita, buena cocina y precio justo, así como la atención de los propietarios que son los que regentan el restaurante y la casa rural.

Entorno privilegiado y pueblo precioso. Hotel con encanto

Es un hotel con mucho encanto en un lugar muy especial. Fui de escapada romántica con mi pareja con un bono que nos habían regalado y la experiencia fue estupenda. El restaurante y la comida también para recomendar. Volveríamos sin duda!