Hotel Tres Vidas Acapulco

Las habitaciones están muy cómodas, tiene todo lo que puedes necesitar, la vista al mar es increíble, la terraza, la alberca y también el servicio y la atención del personal son excelentes. Muy buen lugar para pasar unos días de descanso con una vista increíble.

Es un sueño, desde la llegada te reciben como si nos conocieran de siempre, parecía que estábamos en otro lugar, todo perfecto, elegancia, buen gusto, tranquilidad, los alimentos increíbles y las vistas uffff, literal es una joya, solo estuvimos cuatro días, pero sentimos que nos faltó tiempo. Vimos clases de yoga y una actividad en la alberca con unas cosas que se cuelgan que no habíamos visto antes, pero se veía súper pro y divertido!! Desde ahora será nuestro lugar favorito.

El lugar más lindo en Acapulco! Maravilloso staff, comida deliciosa y los cuartos son un sueño. Sin duda el lugar perfecto para pasar unos días.

Vinimos a gozar de una absoluta paz por tres noches y cuatro días, alejados del mundanal ruido y refugiados en un exclusivo paraje con acceso inmediato de las únicas 10 suites que conforman este concepto mexicano de “hotel boutique” Excelente atención de todo el personal desde el front desk con Diana hasta Adrian y muy en especial Carolina la jefa de cocina. Limpio, discreto, cómodo y tal vez con una menor necesidad de actualizar un poco las habitaciones y sus respectivos baños, pero en general todo estuvo muy bien y recomiendo ampliamente este apacible escondite en una paradisíaca playa en Tres Vidas Beach Club, en costas de guerrero

La atención del personal es muy amable y excelente trato. Lo único que sí nos desconcertó un poco fue que al momento de irnos, uno de los libros de la habitación se había quedado en mi bolsa de playa en el coche y nos marcaron y marcaron de forma muy insistente para regresar a dejarlo cuando nosotros estábamos ya algo lejos. Sin problema y con mucha amabilidad regresamos a dejarlo, pero nos pareció muy exagerada la manera en que por un libro tan sencillo nos hicieran regresar. En todos los hoteles del mundo, revistas y libros no son de mayor importancia... Pero sí se nos hizo muy extraña la manera en que se manejó la situación y hacernos sentir como que "estábamos robando el libro" sin alternativa alguna. Eso nos dejó finalmente una sensación no grata.