Estuvimos en la cabaña que se llama Jungla. En medio de naturaleza. Lugar muy lindo para descansar. Hay sendero también hacia la montaña, para caminar. Excelente servicio de comida, se nota la experticia en los platos y bebidas. Eso sí, estén listos para invertirle su $ a las vacaciones. Tienen que llevar toallas, no lo olviden. La noche está llena de sonidos de la naturaleza, sonidos nocturnos. Los socios, Carolina y John son personas muy amables y cordiales y están atentos a lo que uno necesite. ¡Recomendado! Ya mi gusto personal es no tener nada de parlantes con música, así sea suave, cuando uno se va a descansar a estos lugares. Igualmente, los anfitriones están atentos a lo que uno solicite.
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