Utente ospite
9 dicembre 2022
Atención normal. Aparcamiento, si no hay al final de la calle, hay que ir al final del pueblo, es de tierra en buen estado. Habitaciones muy limpias, camas cómodas y, quitando los típicos inquilinos que pasan por los pasillos gritando y corriendo, muy tranquilo. Amenities champú y gel en sobres. Si quieres secador, puedes pedirlo en recepción. En cuanto al desayuno...fue lo que menos nos gustó. Te sirven un zumo de naranja pequeño, te dan opciones de bebida caliente, pero de comer te ponen un plato de jamón serrano y queso (que está un poco seco si bajas a desayunar a última hora porque lleva desde primera hora servido...), 4 tostadas de pan de pueblo, aceite, mantequilla, mermelada y 2 rebanadas de bizcocho. Un cuenquito de fruta simbólico. No intentes pedir otras opciones porque no tienen nada más. También hay comedor con un menú para comidas y un bar con terraza para tomar algo. Buen sitio para pasar unos días de tranquilidad, el pueblito es precioso y la gente amable!
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