Utente ospite
21 giugno 2024
Elegí este hotel en Huacachina por los buenos comentarios que había visto en varias plataformas. El personal, tanto de recepción como del restaurante fue muy amable en todo momento. Sin embargo, definitivamente NO cumple con la categoría de hotel. El tener una piscina y un restaurante no hace a este lugar un hotel. Las habitaciones están muy mal terminadas, llenas de desperfectos como se puede ver en la fotografías que adjunto, no están aisladas, se escucha todo lo de las habitaciones de ambos lados. Además, en frente hay un hostel y entre la música y el ruido de este y el del propio hotel no hay forma de descansar hasta las 12 de la noche. Al llegar a eso de las 16h nos informaron de que el agua caliente “iba con placas solares”, sin embargo, esa tarde no conseguimos agua caliente y a la mañana siguiente, pudimos ducharnos con agua templada con un triste hilo de agua en la ducha. El desayuno correcto pero sin más (café o te, zumo natural, huevos revueltos y dos bollos de pan por cabeza con mantequilla y mermelada). Con la oferta que hay por la zona, bien valdría que redujesen el precio de la habitación y no lo incluyese. Otro inconveniente es que NO admiten pago con tarjeta, solo en efectivo. Además, cuando fuimos a dormir, tuvimos que sacudir arena de las sábanas. Ya se hace inevitable analizarlas con más detenimiento, lo que nos hizo percatarnos de que en ellas había pelos y el olor no era a limpio. Muy desagradable la verdad. Las toallas de ducha sin embargo si que estaban limpias. Los colchones al menos son cómodos y cuando el ruido te deja puedes descansar. En definitiva, características de un motel de carretera que intentan ensalzar con una piscina y servicio de restaurante. Más les vale que cuando terminen las obras que están haciendo comiencen con las habitaciones también. NO VALE LO QUE COBRAN.
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