Hotel Oleum

Nos ha encantado alojarnos en el Hotel Oleum. Está súper bien ubicado, hay aparcamiento en la misma calle sin problema. Las habitaciones son mejores de lo que esperábamos, nosotros estábamos en la segunda planta, muy confortables, está muy limpio todo y las paredes y ventanas bien aisladas. El baño está reformado. El desayuno es sencillo pero correcto, hay un poco de todo, es self-service. En la planta baja hay un bar que está genial, y en la primera planta hay el restaurante. Cenamos allí y nos encantó la comida, todo estaba muy rico. Los pinchos que sirven en el bar también están muy buenos. Del hotel al Pueblo Viejo hay 10 minutos andando, es un paseo. Nosotros hicimos la visita nocturna el sábado y la diurna el domingo, recomendamos hacer las dos, nos parecieron súper interesantes. La de la noche da un poquito de miedo, pero es muy sorprendente. En la misma calle donde está el hotel hay algunos bares más, todos están muy bien para tomar algo durante el día y por la noche. Seguro que volveremos porque en general ha sido una escapada genial. Muchas gracias por todo.

Comimos en el restaurante en el puente de la Constitución y muy bien. Buen servicio, comida buena y casera, raciones muy generosas. Permiten mascotas lo que agradecemos porque íbamos como un perro. Muy recomendable. Excepcional las alcachofas y la tarta de queso

A pesar de haber una confusión con la reserva,total implicación de la gerente del hotel solucionando el problema.trato muy amable por parte de todo el personal, habitaciones muy limpias, confortables,la cama comoda y el desayuno expectacular,leches de todas clases,bollos,tostadas,cafe express, americano, mermeladas, embutidos.Para repetir

Déjeuner simple mais savoureux servi avec le sourire et une bonne humeur agréable dans un lieu à la décoration soignée et moderne. Un lieu agréable dans une commune plutôt tristounette, écrasée par le malaise de son histoire...

Es un hotel muy agradable, las habitaciones son grandes , limpias y con una decoración muy especial. En baño perfecto y los ventanales con vistas a la iglesia son espectaculares. La atención del personal excelente y a pesar de que habíamos leído que se oía mucho ruido en las habitaciones desde el bar, nosotros no hemos oído nada y hemos estado perfectos. Desayuno correcto. Todo muy bien.

Ubicado en pleno centro de la población de Belchite, junto al ayuntamiento y a la iglesia, este hotel tiene bastante más categoría que las dos estrellas que ostenta, algo que ya había leído en algunos comentarios. Habitaciones con una decoración muy moderna, limpias, cómodas, funcionales, con aire acondicionado, ventanas con doble acristalamiento, secador de pelo y desayuno tipo buffet, con gran variedad, incluso con un exprimidor de naranjas para que cada cual se sirva a su gusto. El precio de la habitación doble, con desayuno incluido, 79 €, lo que es un precio más que razonable. No le encuentro ningún punto desfavorable. Magnífica opción si tenemos que alojarnos por la zona.